25.9.14

Tabiquría ligera 1, ¿Pladur o Fermacell?

Ya es un hecho que las tabaquerías ligeras se han consolidado como una solución eficaz en sustitución de la tradicional fábrica de ladrillo, gracias a su enorme abanico de soluciones constructivas, su ligereza, aislamiento térmico y acústico, su rapidez y precisión de montaje, compatibilidad con los más exigentes niveles de detalle y acabado, además de ejecutarse en seco, es decir, en ausencia de agua.

Esencialmente consisten en tableros de yeso y celulosa que se atornillan a una subestructura ligera y cuyas uniones y encuentros se repasan con pasta para lograr una planeidad adecuada, formando un soporte listo para recibir el acabado deseado, de pintura, papel, alicatado, tela, etc...


Las opciones constructivas y variedad de formatos tanto para paredes como para techos son muy amplias y dan respuesta a cualquier solución planteada en obra. Las principales diferencias entre las placas de las marcas más conocidas residen en las características constructivas de la propia placa, su resistencia, tipo de subestructura y comportamiento termoacústico. Pladur, Knauf, Placo, Fermacell, etc...son algunas de las marcas más conocidas y habituales.

En este post compararemos las placas de Pladur por ser la marca más conocida con las de Fermacell, una alternativa interesante desde una perspectiva ecológica. No obstante esperamos completar esta información en próximos artículos hablando de otras alternativas de tabiquería ligera como la placa ATT, también de yeso natural.

PLADUR (PYL, placa de yeso laminado)

Composición: Las placas Pladur están formadas por un alma pasta de yeso en polvo calcinado, agua, aditivos (reguladores de fraguado, espumógenos, endurecedores) y agregados (fibras vegetales), revestida por ambas caras por laminas de celulosa multihoja. 

Resistencia: Es una placa bastante ligera y flexible, de unos 9 kg/m2 la de 12'5mm de espesor, muy manejable para los instaladores pero de resistencia insuficiente para cargas superiores a 30 kg por taco para tabiquería seca, incluso con doble placa, en cuyo caso será necesario prever el refuerzo interior del tabique que permita transmitir la carga hacia la subestructura de acero. En general recomendamos montar sistemas de tabiquería con doble placa, de igual o distinto espesor, para garantizar un mayor resistencia y aislamiento acústico.

Subestructura: Los sistemas Pladur están diseñados y ensayados para ser montados sobre estructuras ligeras de acero galvanizado. Sobre perfiles de madera de pino no se han realizado ensayos.

Termoacústica: Las placas de yeso laminado, debido a su ligereza y esbeltez, no tienen un buen comportamiento termoacústico, pero esto cambia cuando forman parte de un tabique multicapa donde se incluye un material abosrvente como la lana mineral. En este caso, el comportamiento del tabique arroja valores muy interesantes como aislamiento acústico debido al buen comportamiento en membrana dentro de un sistema masa-resorte-masa, donde la masa la aportan las placas y el resorte el aislamiento de lana mineral. 

Reacción al fuego: Las placas se clasifican como A2-S1-d0, es decir, gracias a su limitado poder calorífico no son inflamables, su producción de humos es de lenta progresión y no producen goteos inflamables. Se trata de un producto excelente ante situaciones de incendio.

FERMACELL (PYN, placa de yerso natural)

Composición: Las placas Fermacell se obtienen de aglutinar agua, yeso y fibra de celulosa obtenida del reciclaje del papel, conformando una masa homogénea sin ningún tipo de cola o compuesto químico, de lo que resulta un material inodoro. Una vez aglutinada la mezcla, se prensa y se seca, imprimándola luego con hidrofugante.

Resistencia: La placa es bastante pesada, 14kg/m2 la de 12'5 mm pero muy resistente a impacto gracias a la homogeneidad aportada por el yeso mezclado con la fibra de celulosa y a la vez capaz de soportar hasta 50 kg de carga transmitida por cada taco para tabiquería seca, muy interesante para colgar muebles sin necesidad de reforzar la subestructura o duplicar la placa.

Subestructura: Una gran ventaja de las placas Fermacell es que están diseñadas y ensayadas para trabajar tanto con una estructura de acero galvanizado como de listones de pino, lo que lo hace muy atractivo para utilizar en arquitectura de madera o de un elevado nivel de purismo ecológico.

Termoacústica: Ocurre como en el caso de las placas de yeso laminado, con la ventaja de que su mayor masa arroja mejores valores de comportamiento acústico a ruido aéreo: Ra=45dBA frente al Ra=38dBA de las primeras. 

Resistencia al fuego: Su comportamiento ante el fuego es idéntico a la de las placas de PLadur, es decir, excelente.

Curvatura: La capacidad de curvado es inferior a sus competidoras, aunque es posible hacerlo en seco para radios mayores de 4m y previo humedecido durante al menos 10 horas para radios entre 1'5 y 4 m. Para radios inferiores deben doblarse por empresas especializadas.

Otros: Queremos destacar dos puntos fuertes y hasta la fecha exclusivos de Fermacell; El primero, la posibilidad de hacer suelos combinando diferentes espesores de placas con o sin aislamiento termoacústico, gracias a su gran resistencia, como soportes para acabados de madera o cerámicos. El segundo es la Línea Greenline, especificada tanto para paredes como para suelos, que va un paso más allá en la lucha contra la neutralización de COV'S (compuestos orgánicos volátiles), al incorporar un tratamiento superficial la base de queratina, que absorbe dichos compuestos nocivos, contribuyendo notablemente a la construcción de un ambiente saludable.

CONCLUSIONES

En nuestra opinión, Fermacell es un producto más convincente por su versatilidad (posibilidad de utilizar en suelos y con subestructura de madera), mayor resistencia, mejor aislamiento acústico y por su menor contenido de aditivos y colas. Es, a nuestro juicio, la opción más interesante para aplicar en ecoarquitectura.

Pladur y similares aportan mayor facilidad de montaje por su ligereza, aislamiento térmico y un precio claramente inferior. Del comportamiento térmico decir que lo consideramos una cuestión menor (tanto para Pladur como Fermacell) en tanto que al tratarse de placas de pequeño espesor, su influencia en el resultado térmico final de un edificio es casi irrelevante. Y eso en el caso de los trasdosados o falsos techos sobre cerramientos exteriores porque en el caso de tabiquerías interiores entre ambientes adiabáticos carece de toda importancia. No ocurre lo mismo con el aislamiento acústico a ruido aéreo, que si es importante entre dependencias interiores de una misma vivienda, en cuyo caso es preferible la placa de Fermacell.

Un parámetro que conviene resaltar por su importancia para crear ambientes saludables es que las placas de yeso laminado (PYL) incorporan mucha más cantidad de productos orgánicos como el cartón que cubre toda su superficie lo que las hace más proclives a retener microorganismos. En cambio, las placas de yeso natural no sólo tienen menor cantidad sino que además está embebido en todo el espesor de la placa.

Lógicamente la comparativa podría extenderse mucho más incidiendo en factores más técnicos pero no es el objetivo de este post. Nos hemos limitado a poner sobre la mesa las cuestiones más asequibles a los usuarios finales que tengan dudas a la hora de escoger un material para su vivienda. Esperamos haberlo logrado.

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